Es una gran alegría, poder
recuperar, después de varios años, esta sección de nuestro periódico escolar La
Cometa en la que recordábamos cómo era el cole y las cosas que acontecían en él
hace unos años. Y es que, para los que conocemos el colegio desde hace ya
varios años, recordar los viejos tiempos nos produce una sensación de nostalgia,
pero también de felicidad por haber vivido aquellos tiempos tan felices. Os
aconsejo que os quedéis hasta el final del artículo porque he dejado lo mejor
para el final.
Hace 25 años, nuestro colegio
sufrió una serie de transformaciones que le acercaban a cómo es en la actualidad.
En primer lugar, ocurrió algo en el colegio que hizo necesario que la Sala de
Profesores cambiase de ubicación. Se amplió el aula de informática y como
consecuencia, la Sala de Profesores se instaló en un espacio libre que existía
en la entrada del edificio de Educación Infantil. Para ello, el ayuntamiento
colocó unas mamparas que cerraban ese espacio, permitiendo así que la Sala de
Profesores haya conservado esta ubicación hasta la actualidad.
También se colocaron unos
canalones en las entradas de los edificios de Educación Primaria. Sin duda una
gran mejora que permitía que en los días de lluvia se pudiese acceder a los
edificios sin acabar empapados por el agua que caía de los tejados. Además, otra
de las mejoras que experimentó el colegio, fue el cambio de las ventanas de los
edificios del Primer y Segundo Ciclo de Primaria.
La biblioteca de nuestro centro
también estaba de celebración. Gracias a la donación de 250.000 pesetas (1.000
pesetas por alumno de Primaria) por parte del Programa de Gratuidad de
Materiales Curriculares y la aportación del colegio, su pudieron adquirir más
de 450 libros.
Como es tradicional, durante el
primer trimestre del curso, el cole celebró su fiesta patronal. El día de San
José de Calasanz cayó ese año en lunes. Según cuentan los alumnos en el
periódico, después de la misa celebrada en San Mateo, se tomó el tradicional
chocolate con torta y posteriormente, en el patio, tuvieron lugar los distintos
juegos y competiciones: Ajedrez, damas, ping-pong, voleibol, fútbol… incluso
hubo una carrera de cintas en bicicleta. También cuentan que, por la tarde, después
de las competiciones de fútbol y voleibol, hubo regalos para todas las clases y
a los niños les repartieron caramelos.
Los niños de 6º de Primaria, entrevistaron
a una paisana, que por aquel entonces se encontraba de visita en el pueblo,
pero que vivía en Bolivia, ejerciendo de misionera ayudando a los más
necesitados. Se trata de Miguela Lozano Villalta. Tras la entrevista, los
alumnos de 6º curso, realizaron una colecta para enviársela a Miguela y que ella
pudiera repartirla entre sus niños. Así que, 19.000 pesetas se fueron hacia
Sucre en Bolivia, para contribuir a ayudar a los más necesitados.
Al comenzar el curso 2000-2001,
varios profesores nuevos llegaron al colegio: Doña Rocío, Doña Miguela, pero también algunos/as maestros y maestras que seguro que os sonarán de algo: Doña
Raquel (que por una temporada fue sustituida por Doña Pilar), Doña Casilda y… ¡¡¡SORPRESA!!!
¡Justo cuando se jubila, se cumplen 25 años de su incorporación al colegio! ¡Has
leído bien, hace 25 años, Eugenio se convirtió en maestro de nuestro cole! ¡Qué casualidad! ¡Enhorabuena a los tres por todos estos años formando parte de la historia de nuestro colegio!
Me despido agradeciendo al colegio la oportunidad
que se me ha brindado de descubrir la historia del cole y de haceros revivir
tan buenos momentos y deseándoos a todos... ¡Felices Fiestas!